Tras la persecución sufrida hace unos meses en lo que se conoció popularmente como “Caza de brujas” y la intención del gobierno de aprobar su famosa “Ley Mordaza” que recrudece la represión sobre cualquier tipo de protesta ciudadana, en los últimos días la clase obrera vuelve a estar en el punto de mira mediático tras las Marchas de la Dignidad del 22M, la Huelga Estudiantil del 26 y 27 y el Jaque a la Monarquía del 29 de marzo.
Dichas movilizaciones dejaron un saldo de 86 detenidxs y decenas de heridxs (incluyendo una persona que ha perdido un testículo y otra que ha perdido el 90% de la visión de un ojo, ambos casos debidos al impacto de sendas pelotas de goma) en las cargas policiales posteriores. A día de hoy continuamos esperando la liberación de los compañeros Miguel e Isma (jóvenes de Carabanchel y Valdemoro, respectivamente) que siguen prisioneros del Estado, acusados de desórdenes públicos, atentado a la autoridad y lesiones durante las cargas del 22M.
Y es que la represión es la herramienta del poder para seguir salvaguardando los intereses de las élites, a la vez que criminalizan a los movimientos sociales a través de sus medios de manipulación. Utilizando la amenaza, la coacción, las identificaciones sistemáticas, las sanciones, etc. intentan acabar con el derecho a la libre expresión, negando unas protestas legítimas que muestran la indignación de un pueblo harto de abusos y que no quiere callarse porque aún tiene mucho que decir.
Ahora más que nunca no debemos ceder a su política del miedo y permanecer unidos en la lucha por la dignidad que el capitalismo y éste Estado policial nos están arrebatando, mientras violan de forma sistemática los derechos más básicos de lxs ciudadanxs.
¡BASTA DE ABUSOS Y MONTAJES POLICIALES!
¡ISMA LIBERTAD! ¡MIGUEL LIBERTAD!
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